Foto: El sacerdocio es un don precioso para la Iglesia y para toda la humanidad
Por: Nezahualcóyotl / Diócesis de Nezahualcoyotl
El pasado lunes 10 de junio, la comunidad de la Diócesis de Nezahualcóyotl celebró llena de júbilo el XXX Aniversario de Ordenación Presbiteral de dos de sus sacerdotes.
El Padre Eduardo Barajas conmemoró con alegría y gratitud su Aniversario de Ordenación en la Parroquia Nuestra Señora de Talpa, Col. Estado de México. La Santa Misa tuvo lugar a la 1 p.m. Los asistentes compartieron momentos de oración y reflexión, recordando la vocación y entrega del Padre Eduardo a lo largo de estos treinta años.
Al finalizar la Santa Misa, todos compartieron una comida fraterna, fortaleciendo los lazos de comunidad y amistad. El Padre Eduardo expresó su agradecimiento por el apoyo constante de todos los presentes y reafirmó su compromiso de seguir sirviendo a Dios y a su pueblo.
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Ese mismo día, en la Parroquia La Medalla Milagrosa, en la Colonia Impulsora, el Padre Jaime Hernández también celebró su Aniversario de Ordenación Sacerdotal. La Misa de Acción de Gracias se llevó a cabo a las 12 p.m., La comunidad se reunió para agradecer a Dios por su ministerio. Al término de la celebración, los feligreses se reunieron para compartir momentos de alegría y gratitud.
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Ambos sacerdotes, acompañados por sus amigos sacerdotes, familiares, amigos y miembros de la comunidad, expresaron su compromiso con el servicio pastoral y su amor por la Iglesia.
El sacerdocio es un don precioso para la Iglesia y para toda la humanidad. A través de los sacerdotes, Dios sigue bendiciendo y guiando a su pueblo. Que estas celebraciones nos inspiren a valorar y apoyar a nuestros sacerdotes en su servicio generoso y amoroso. Oremos constantemente por ellos, para que sean imagen viva de Cristo en medio de sus comunidades, así mismo, sigamos pidiendo a Dios por el aumento de vocaciones a la vida sacerdotal.